Los estudiantes debemos tener en cuenta el rol social y político que nos cabe, ya que el pueblo sacrifica muchas cosas para que algunos privilegiados puedan seguir sus estudios universitarios. Es por eso, que debemos devolver al pueblo lo que este nos dio, y solo puede devolverse con militancia. Una militancia, que involucre al estudiantado con los sectores populares y la clase trabajadora, llevando los conocimientos que la universidad nos provee hacia los sectores más desfavorecidos y luchando por los intereses del pueblo. Después de la larga noche neoliberal, que aplaco notablemente el rol del Estado como garante de la Educación Pública e instaló el imaginario colectivo de “estudiar solo para conseguir una buena posición económica” , ahora nos encontramos ante un nuevo modelo de país, encarnado en un proyecto nacional y popular, que como tal, desea que una institución como la universidad y los que concurren a ella, sirvan con sus conocimientos al pueblo y no a intereses mezquinos y personales, es decir, que vean en la educación una herramienta para cambiar la realidad social y política, mirando siempre como fin los intereses colectivos del pueblo.
En palabras de quien fuera Rector de la Universidad de Buenos Aires, que en 1973 comenzó a llamarse Universidad Nacional y Popular de Buenos Aires, Rodolfo Puiggrós El objetivo es claro: “Aspiramos a que el universitario no sea un ser aislado a la espera de un título. Aspiramos a su compromiso con el Proyecto Nacional”.
Movimiento Universitario Evita La Matanza.
